Flaquito como un cochinito
A la hora de viajar siempre nos encontraremos con situaciones peculiares, de repente, creadas por ti, pensamientos en los que analizas según sea lo que pase a tu alrededor. Me encontraba en una bendita cola para comprar pasaje hacia ciudad Bolívar, una cola, porque creo que ya pasó de moda cuando comprabas pasajes hasta con una semana de anticipación y así contabas con la comodidad de llegar a la hora acordada por la línea que elegiste, a simplemente abordar la unidad que te llevaría a tu destino; en la actualidad no es así, estás obligado a comprar el mismo día del viaje, que estrés tan bravo, en ese sentido vamos para atrás. Durante la cola, salió de la taquilla "Luis H C" Bueno Bueno, a hacer la cola porque si no, no se van...palabras sabias; unas señoras detrás mío comentaron entre ellas, viejo verde, cochino, mal hablado, mal educado; en realidad no escuché ni groserías de "Luis H C" ni mal genio alguno, simplemente unas palabras con un tono de voz campechano como el del ex-presidente. Llegó mi turno para comprar mi pasaje, todo normal, cédula, dinero, pasaje, observé al lado del chamo que vendía los boletos, un cochinito de aguinaldos, esa tradición venezolana de poner al cochino plástico a recibir posibles propinas, mal sitio para este, con tantas quejas no creo que engorde, saqué mi cámara y le dije al vendedor que estaba haciendo un concurso de cochinitos, le tome una foto rapidito, pues, fue una idea de momento, el chamo me vio, le leí el pensamiento "este, está es loco de perinola" bueno, la pegó. De acuerdo a mi boleto, tenía que esperar para viajar unas 4 horas, tiempo necesario para crear...Me dirigí a unas mesas, saqué mi libreta y dibujé un cochinito con una medalla de primer lugar, algo rapidito y sencillo; bueno, empecé mi experimento, caminé desde el primer local hasta el último, todos tenían cochinitos, aproximadamente 20 locales de comida rápida dentro del terminal, en cada uno abordé al dueño, vendedor etc., le voy a tomar una foto para el concurso a tu cochinito, unos disfraces que tenían estos, muy originales, unos se reían y una señora dijo, este cochinito mío es feo y chiquito, no le tomes foto y se reía, otros que le meta su propina y preparado como ya estaba, con unas cuantas monedas listas para estos ataques que ya sabía que podían venir, le metía las monedas, que sonaban con un vacío inmenso, nada amortiguaba a estos pobres flacuchentos cochinitos, fue un trabajo divertido y que me dio un pasatiempo para mi espera por la hora de iniciar el viaje; el sorteo lo realicé una hora antes de mi partida, el juez y animador, yo mismo, irreversible...la ganadora fue la señora que dijo que su cochinito era feo y chiquito, le di su dibujo y la señora lo agradeció con una gran sonrisa; nos dirigimos a abordar el autobús, ¡sorpresa! El chofer era “Luis H C”, un trayecto largo, pues a dormir...Un fin de semana en Ciudad Bolívar debido a la carrera "nunca te rindas" de los amigos de Orinoco Runners de dicha ciudad, un evento que se realizó en la última fecha de calendarios oficiales de carreras en Venezuela, bueno eso creo, un evento muy bueno, amabilidad de sus organizadores, detalles bien planificados para la entrega de materiales, carrera, caminata, calentamientos, zumba, con entrevistas, invitados tan espectaculares como los amigos del programa tiempo de corredores de Caracas "Ernesto Linzalata y la hermosa Mayra De Libero", señal en vivo del programa radial "suela a fondo" de la emisora Sport 96.7FM de Ciudad Bolívar, la cual brindó cobertura y señal en vivo para el que sintonizara al momento de la carrera, muy bueno este detalle. La carrera se realizó en los alrededores de El fortín Zamuro, un monumento histórico, pero de significación posterior a la independencia, el cual fue determinante en la victoria de Ciudad Bolívar, donde concluyó la revolución libertadora en el año 1903; también pasó por el mirador Angostura, desde donde se podía apreciar una linda y espectacular vista del río Orinoco y el Puente Angostura, pasamos por la laguna de los Francos; entre la humedad y el ritmo que llevaba fue puro turismo, como el que me gusta, sudando, disfrutando y divirtiendo a sus ciudadanos a tempranas horas de la mañana; la premiación fue muy buena, ganaron los esposos Bellorín que andan enrachados este año; un detalle de última hora, mientras descansaba sentado en una acera, ¡sorpresa! "Luis H C" con la franela del evento, lo abordé con mi máscara puesta, no caminó, pero fue a apoyar a su esposa e hija y tomarle fotos, "Luis Herrera Campins" vive en Ciudad Bolívar y tiene que lidiar casi a diario con personas mal humoradas por cuestiones del sistema actual, el sigue reglas porque es su trabajo, la culpa no es de el, es un ciudadano que vive también sus momentos de relax como el de este pasado domingo en la caminata-carrera “nunca te rindas” de la ciudad. Por eso hacen falta mas y mas eventos de estos en Venezuela; Gracias Alexis Bolívar, jhoncito, Elvis, equipo de Orinoco Runners por la invitación; Gracias Ciudad Bolívar, nos vemos el año que viene con seguridad...Ojalá que las cosas mejoren y no tengamos tantos cochinitos tan raquíticos...
Coge consejo y llega a viejo
Estamos en época decembrina, donde las alcancías con forma de Cochinito constituyen un emblema, aunque en la lista clásica tradicional navideña venezolana, siempre se incluyen el nacimiento, las hallacas, el pan de jamón, el árbol de navidad, etc., no debemos olvidar la llegada de los cochinitos a los quioscos, panaderías, mercados, centros comerciales o en puestos de buhoneros y bodeguitas. Los cochinitos de navidad son un mecanismo simpático de pedir la ñapa en esta época en cualquier comercio venezolano. Unos cochinitos tienen más éxito que otros debido a su decoración creativa que supera cualquier expectativa posible. En Venezuela se puede hacer un museo, donde se exhiban estos, con sus diferentes estilos. El cochinito alcancía es una costumbre venezolana fugaz, navideña, en la que ninguno de ellos sobrevive hasta enero. Por otro lado, hay quienes se quejan del uso del cochinito de navidad, argumentando que es terrible que después de un mal servicio, te vean con mala cara sólo porque decidiste no meterle dinero al cochinito. Así es Venezuela y sus cositas en Navidad.
Rumor de cuatro esquinas